top of page


Partimos de la creencia en el  potencial creador y transformador de todas las personas. Para nosotros, toda persona es esencialmente creativa. La tarea es enfrentarnos a  los miedos inoculados en diferentes ámbitos (familia, escuela y sociedad en general) y superarlos. Creemos en la riqueza estética de la diversidad y de las historias cotidianas;  en la construcción colectiva de la realidad y de la memoria;  en la restitución del rol protagónico de cada persona en sus procesos vitales y en el devenir social. Estamos convencidos  del poder vivificante y sanador del arte en las personas y en las comunidades que ellas habitan. Creemos  y estamos convencidos de esta forma de concebir el teatro: sólo es necesario propiciar el marco y las oportunidades para que la capacidad creativa de las personas se desarrolle.

Las estructuras altamente jerarquizadas, por lo general desalientan la creatividad. En ocasiones se participa porque parte del trabajo consiste en aportar reflexiones y soluciones a un problema dado. Participar por convicción en estructuras horizontales, en donde se crean y proponen acciones diversas, posee un relieve diferente. Promovemos en nuestro trabajo, tanto de puertas adentro,  como hacia fuera de nuestro grupo,  relaciones horizontales,  donde a través de ejercicios y dinámicas, facilitamos la creatividad, sorprendiéndonos siempre ante la  variedad de soluciones y propuestas  que surgen en  grupos que se desarrollan bajo esta premisa.

 

 

 

 

bottom of page